Coño con la izquierda o así es la izquierda de hoy (II)

Cuántas veces habremos oído que la izquierda es la defensora de los trabajadores, que está con ellos o que tiene en gran consideración los derechos sociales y llama a la mínima machista a aquél que critica o despide a una mujer, según ellos, por el mero hecho de serlo. En definitiva, que la izquierda es honrada con las personas y tiene superioridad moral respecto a la derecha.

No es el objeto de esta entrada el analizar si tales afirmaciones son ciertas o no, pues deberíamos remontarnos hasta Pablo Iglesias en el caso español para hacerlo. Lo que esta entrada sí pretende es dar unas pinceladas de hasta qué punto podría ser mentira el primer párrafo. Vayamos por partes.

Primero. Libertad Digital se hace eco de una noticia, aunque más bien podríamos calificarlo de curiosidad, eso sí, muy reveladora. En así se aprieta el cinturón ZP, podemos ver el gusto, o mejor, el buen gusto de ZP para vestir, muy obrero él.

El chaval se quiere mucho y se pone lo mejor, nada más y nada menos que un cinturón de 500€ de la marca Hermés. Resulta poco menos que curioso que alguien que es capaz de comprarse un cinturón de 500€ diga que representa a los trabajadores de este país o que la gran mayoría de ciudadanos cobra entre 17.000 y 24.000€, pero se olvida que gran parte de los curritos vive con alrededor de 600€.

Pero ZP, socialista él, lleva un cinturón que el 99% de los españoles no podría permitirse, y puede que me quede corto. Y más aún cuando éstos se tienen que apretar el cinturón con la crisis, nunca mejor dicho. Lo que debería de hacer un currante cuando escuche al cejas hablar sobre la defensa de los que menos tienen debería ser poco menos que un corte de mangas y el célebre "subete aquí y pedalea". Qué fácil es ser de izquierdas siendo ZP o Leire Pajín, la jovencita que no sabe lo que es ser mileurista.

Segundo. La Delegación del Gobierno en Extremadura tendrá que indemnizar a una trabajadora con 40.000 € por despedirla cuando estaba embarazada. Prefiero no pensar en lo que hubiesen dicho desde filas socialistas si el partido implicado fuese el PP. Ardería troya.

Estas pinceladas nos pueden aproximar a la afirmación de que la izquierda sabe muy bien venderse pese a sus actos y tiene más mano ancha con los españoles que la derecha. Pero claro, los políticos que supuestamente son de derechas se acojonan cuando los contrarios se mueven. Qué ocurre si no en Galicia, con el perdedor BNG exigiendo que no se dé un paso atrás con la imposición del gallego y Feijoó que acepta para no cabrearlos. En fin, unos muy listos (nacional-socialistas, anda lo que me ha salido, no estaba preparado) y otros muy tontos, o simplemente gilipollas.