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jueves, 10 de abril de 2008

Joder, qué tropa!

Me gustan ambos, aunque son diferentes. De ella, muchas de sus ideas. De él, que podría ganar votos para el PP y su forma de hacer política (hechos aislados a un lado, como pedir entrar en las listas en público o decir que había perdido antes de las elecciones). Son buenos políticos, por algo arrasan en madrid.

Eso sí, cuando comienzan a enzarzarse no hay quien los aguante. Un político es o debe ser ambicioso, eso está bien. Pero no lo está tanto cuando eso implica dejar al partido por los suelos, francamente. Los periodistas se están relamiendo.

Esto me recuerda a aquella época en la que era el PSOE el que estaba a garrotazos hace unos años, pues el de un sitio decía una cosa y el otro la contraria, según el lugar de España. Lo "gracioso" es que en este caso, los dos son personalidades del partido en Madrid... Deberían dejarse de gaitas y dedicarse cada uno a lo que los ciudadanos les han encomendado (no pasará, lo sé, esto les puede más). Sin embargo, haría bien al PP.

Con todo ello, no le iría mal a Rajoy meter a Gallardón, en cuanto a posibilidad de voto. Lo malo, es que hacerlo... convierta lo que hay ahora en poco, y se lie más la cosa. Por ello es necesario poner orden cuanto antes y que la gente lo acate. Pero el hecho de nombrar a Gallardón secretario General animaría a Aguirre a presentarse definitivamente (si no lo piensa ya) a las "primarias" del partido. Y ya se sabe que una organización no puede permitirse tener dos líderes en una lucha de poder (puesto que tal acontecimiento se celebra dentro de unos años), el partido se puede ir a hacer puñetas... Orden y YA.

No me gustaría estar en su lugar, Marianín.

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